LAS ENCIAS

 La encía está constituida por tejido fibroso cubierto por epitelio que recubre el proceso alveolar que está en contacto directo con el diente y que se continúa con el ligamento periodontal.

Características de la encía sana:

Color: Rosado pálido.
Puede variar según las personas y se relaciona con la pigmentación cutánea. Contorno: Depende de la forma de los dientes, de su alineación en la arcada, de la localización y tamaño del área de contacto con los dientes contiguos y del patrón de encía (grueso, normal o fino). Consistencia: Firme y resilente. Textura de la superficie: Está queratinizada y puede presentar pequeñas depresiones en forma de piel de naranja.

 Límites:

Comienza en la línea mucogingival y termina en el margen gingival libre. En el paladar no existe una línea mucogingival. Partes de la encía:
Encía marginal o libre: se extiende desde el margen más coronal de los dientes hasta la hendidura gingival (0.5 – 2 mm).
Encía insertada: se extiende desde el surco gingival hasta la línea mucogingival del fondo de saco vestibular y piso de la boca. (9-1mm)
Encía interdentaria: llena el espacio interproximal desde la cresta alveolar hasta el área de contacto entre los dientes.
Surco gingival: es el espacio estrecho alrededor del diente, limitado por un lado de este y por el otro epitelio del margen libre de la encía. (1.5 a 1.8 mm.)

Funciones de la encía:
• La función básica que cumple es de protección, absorbe fuerzas para que no sean transmitidas al tejido óseo.
• Protege al diente de la agresión de las bacterias y entrada de las sustancias extrañas mediante el epitelio de unión.
• Ayuda a mantener fijos los dientes a los maxilares.
• Facilita el deslizamiento de los alimentos evitando que se depositen sobre los dientes.
• Da buena apariencia a los maxilares.
• Da buena apariencia a los maxilares.

 Enfermedades de las encías:

Las encías pueden llegar a inflamarse debido a una mala higiene dental, pudiendo afecta el tejido gingival y en un caso más severo al hueso que sostiene los dientes. La inflamación de las encías consta de tres etapas: 1. Gingivitis: en esta primera etapa la inflamación se da por acumulación de placa, sin embargo el daño reversible, ya que el hueso y el tejido conectivo aun no han sido afectados.
2. Periodontitis: es una gingivitis avanzada, en donde el hueso y el tejido conectivo han sido dañados de forma irreversible.
3. Periodontitis avanzada: en esta etapa final las fibras se encuentran destruidas al igual que el hueso que sostiene los dientes, por lo que se requiere de un tratamiento mucho más profundo realizado por un dentista.

Detección de la enfermedad periodontal:

Pueden presentarse problemas en la encía si se observan algunos de estos síntomas en la misma:

• Enrojecimiento, inflamación o sensibilidad.

• Sangrado en el cepillado.

• Retracción de las encías.

• Mal aliento.

Recomendaciones para llevar tener unas encías saludables:

Lo ideal es cepillarse después de cada comida por lo menos cinco minutos por vez.

El cepillado deberá ejecutarse con suavidad para evitar dañar las encías.

Por ultimo, es esencial visitar al dentista con regularidad y así prevenir cualquier enfermedad que pueda afectar a la salud bucal.

Claves para una correcta salud gingival:

 • Cepillar los dientes 3 veces al día después de las comidas.

• Utilizar un cepillo de filamentos delicados, capaces de eliminar la placa bacteriana sin dañar las encías.

• Emplear un enjuague bucal especifico de uso diario para encías (recomendado sin alcohol) 

• Masajear también las encías con el cepillado, realizando un movimiento vibratorio para fortalecer los tejidos blandos.

• Realizar una limpieza de los espacios interdentales, mediante el uso de la cinta o seda dental y/o cepillos interproximales.

• Limpiar la lengua con ayuda de un limpiador lingual.